El Estado del Imperio, Semana 12

Un Relato Sobre las Actividades de los Súbditos de la Divina Emperatriz Durante Este Tiempo de Guerra

 

por Shawn Carman

Traducción de Mori Saiseki

 

 

La Cuarta Semana del Mes del Dragón, Año 1172

Mi Emperatriz,

Perdonadme si empiezo la descripción de los eventos de esta semana sin el típico preámbulo. La verdad es que estoy simplemente exhausto, emocional y físicamente, por la enormidad de esta tarea.

La semana pasada informé con gran alarma de un número de amenazas que se habían quedado sin respuesta en los días precedentes. Parece ser que no fui el único que quedó muy preocupado por lo que podría ocurrir como resultado de esas nefastas situaciones. En un caso, informé de Destructores apareciendo en la costa cerca de las ruinas de Otosan Uchi. Esta amenaza fue tomada en cuenta y una unidad procedente del sur fue enviada a ocuparse de ella. Como informa mi heraldo, los comandantes del frente sur creen que son los más adecuados para ocuparse de los Destructores y que los clanes del norte no tienen experiencia en el asunto. Esto es verdad, por supuesto, pero espero que esa actitud no cree una brecha entre vuestros clanes antes de que concluya la guerra. En cualquier caso, la unidad enviada fue la de los Acosadores Hiruma, una unidad conocida por su velocidad y competencia. Mi heraldo informa también que el comandante, Hiruma Todori, estaba hambriento de venganza contra las fuerzas que les impedían llegar a Shiro Hiruma, ahora perdido tras las líneas enemigas, su destino completamente incierto. Los Acosadores llegaron a la orilla en medio de la noche y, si creemos el informe, se echaron al agua para nadar y abordar el barco de los Destructores. Allí, mataron a varios de ellos, cometieron varios actos de sabotaje, presumiblemente como plan secundario, y luego ejecutaron su plan principal: hundieron el barco con la Centuria aún a bordo. Los Acosadores luego volvieron nadando a la orilla. No tengo ni idea como consiguieron una tarea de tal magnitud; solo puedo asumir que operaban bajo la influencia de una ira y odio exorbitante. En cualquier caso, las pérdidas de la unidad fueron pequeñas, pero mi heraldo informa que el odio de Todori no ha disminuido nada.

Aunque la Centuria que iba por el agua fue destruida, parece que estuvieron presentes en el área el tiempo suficiente como para enviar exploradores para determinar la mejor senda a el objetivo que buscaban, presumiblemente en las tierras Grulla o, no lo quieran las Fortunas, la propia Ciudad Imperial. Estos exploradores, una unidad avanzada de un tamaño considerable, consistía principalmente en los extraños gaijin humanos de los que hemos sabido en diferentes enfrentamientos contra los Destructores. Parecen normales en muchos aspectos, aunque vestidos con ropajes no habituales y que llevaban accesorios que aún no sabemos que son; pueden ser joyas de algún tipo, o posiblemente algún tipo de restricción. ¿Son esclavos humanos? No lo sabemos, y solo hablan en lenguas desconocidas, por lo que no podemos interrogarles. Estos exploradores se adentraron aún más y casi llegaron a la frontera de las tierras León, peligrosamente cerca de la propia Ciudad Imperial, cuando los interceptaron los Exploradores Shinjo. Los Acosadores habían alertado antes al comandante, Shinjo Dun, de su plan, y este movió su fuerza como una medida secundaria. Tenemos suerte de lo que hiciese, ¿por qué quién sabe que funesto final hubiese habido por la incursión de los exploradores hasta casi la Ciudad Imperial? Dun y sus hombres erradicaron los exploradores de los Destructores, no dejando a nadie vivo. Sus posesiones están siendo actualmente examinadas por un grupo de investigadores Kitsuki y Asako operando bajo las órdenes de intentar determinar como combatir mejor a estos hombres y a sus señores vestidos de hierro, o quizás sirvientes? No lo sabemos.

Igual que los Destructores que estaban cerca de Otosan Uchi, hubo un avistamiento de Destructores cerca de la costa Grulla, algo más al sur. La Centuria a bordo tomaron tierra justo al sur de las Montañas de la Espina Dorsal del Mundo, cerca de las posesiones Daidoji. Los Daidoji, que en gran parte están desplegados en las provincias meridionales por si hay incursiones de los Destructores, fueron incapaces de responder a tiempo a la amenaza. Afortunadamente, las fuerzas aliadas de los Guardianes del Clan León y los magistrados Grulla conocidos como los Ojos de la Dama Doji se juntaron para interceptar a estos Destructores. El enemigo desembarcó, algo que incrementó dramáticamente la amenaza que suponían. Los León y los Grulla lucharon valientemente, deteniéndoles, pero incapaces de hacerles retroceder, faltándoles a ambas un componente de infantería pesada con la fuerza suficiente para una tarea así. Afortunadamente, el comandante Grulla, Kakita Idzuki, pidió ayuda a un aliado que viajaba con ellos. Este aliado era un ise zumi llamado Togashi Gato, un monje viajero y maestro de varios estilos de lucha sin armas que le había enseñado su amigo y sensei Taro, fue capaz de rodear las primeras líneas de los Destructores con su especial estilo acrobático. Mi heraldo informa que Gato fue capaz de incapacitar al comandante de esta Centuria con precisos ataques sin armas, y aunque sufrió heridas significativas, fue capaz de marcharse del campo de batalla bajo sus propias fuerzas. El caos sembrado tras la derrota fue tal que los Guardianes y magistrados fueron capaces de darle la vuelta a la situación y hacer que la Centuria retrocediesen hasta el mar.

Peligrosamente cerca de la batalla de los León y Grulla, los Jinetes de la Tormenta del Clan Mantis se estaban ocupando de un terrible brote de plaga dentro de sus pequeñas provincias en el continente. Los Mantis son un clan muy interesado en el bienestar de sus sirvientes de castas bajas, parecidos en ese aspecto a los Unicornio. Aunque las Islas de la Seda y las Especies, donde el poder del clan es más fuerte, casi ha permanecido inmune a los estragos de la plaga, sus provincias en el continente has experimentado ocasionales brotes, aunque algo limitados. Que sepamos, este es el primer brote importante en las tierras Mantis, y los Jinetes de la Tormenta respondieron adecuadamente. Con sus poderosas habilidades, fueron capaces de aliviar en algo el sufrimiento, pero incluso con esos poderosos shugenja se puede hacer muy poco gracias a los kami. Afortunadamente, entre los que se dirigieron a la región estaba un samurai llamado Tsuruchi Gidayu, un samurai y jefe de mercaderes especialmente rico que gastó muchos recursos personales para adquirir los suministros adicionales necesarios para consolar a los afectados. Igualmente, los Mantis tienen entre ellos a una joven gaijin llamada Arjuna Singh, relacionada de alguna forma al samurai Yoritomo Singh, a quién recordáis de la Corte de Invierno. Esta Arjuna fue capaz de utilizar los recursos de Gidayu para crear brebajes de hierbas que, aunque incapaces de curar la plaga, aliviaron los síntomas hasta el punto que la mortalidad en este brote fue sorprendentemente bajo. Y, por supuesto, si alguno se volvió a levantar por efecto de la enfermedad, los Jinetes de la Tormenta se aseguraron que su vergonzoso regreso se podía medir en solo un instante.

Quizás recordáis, Emperatriz, que los Escorpión han estado librando solos una guerra contra la plaga que ha asolado sus tierras y que se ha extendido a las tierras sin afiliación que rodean sus provincias. Parece ser que sus ayudas al Dragón en las últimas semanas no han pasado desapercibidas o poco apreciadas, ya que los famosos Justicars Dragón han viajado a las tierras Escorpión para ayudarles con otra terrible serie de brotes. La habitualmente denostada Guardia de Élite Bayushi aislaron el área infectada y entraron para hacer las truculentas tareas que les parecieron adecuadas para contenerlo adecuadamente, y los Justicars mantuvieron un perímetro adecuado, asegurándose de que nadie que intentase abandonar el área tuviese signos de plaga. Me han dicho que una unidad de duelistas entrenada por vuestra antigua familia entre los Kitsuki es una fuerza temiblemente efectiva.

Y por lo tanto parece que mi informe esta vez es bastante positivo, de lo que me alegro, pero ya no puedo permitir que mi esperanza crezca, ya que se ha visto aplastada una y otra vez durante esta temporada de guerra. En especial, me horrorizan informes de un brote de plaga cerca de las tierras sin afiliación entre las tierras Escorpión y Grulla que parece ser inmensa comparada con los anteriores brotes. Aldeas completas arrasadas hasta el último hombre, todas cerca unas de las otras. Además, los informes iniciales, aunque difíciles de confiar en ellos debido al pánico de aquellos que estuvieron en ese área, parecen indicar que el porcentaje de reanimación en esta región es muchísimo mayor que todo lo visto anteriormente. Si esto es verdad, nos podríamos estar enfrentando a la repentina aparición de una fuerza enemiga que posiblemente se cuente por miles, y tras el frente sur. No soy un militar, pero temo lo que pueda significar esto.

Siempre vuestro servidor,

Miya Shoin

Heraldo Imperial